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La transformación tecnológica del sector textil es un proceso complejo que implica la automatización de procesos, la integración de tecnologías disruptivas y la creación de nuevas cadenas de valor circulares para caminar hacia una moda más sostenible
Si bien esta revolución hacia una moda más sostenible no ocurrirá de la noche a la mañana, la legislación europea está impulsando este cambio y estableciendo un marco regulatorio favorable.
Nos encontramos en un nuevo momento de cambio en el sector téxtil, el previo a una revolución tecnológica, que en esta ocasión va a estar apalancada en el objetivo de ser más sostenibles. La creciente presión regulatoria, centrada en el ciclo de vida completo de las prendas, está acelerando la adopción de tecnologías que permitan un modelo de producción y consumo más sostenible.
En este caso, intentando reducir el residuo y el impacto generado por el mismo, se intenta aplicar modelos circulares que prioricen la reutilización y el reciclaje, evitando así la producción de prendas nuevas y la gestión de desechos.
En este ámbito de preparación para el reciclaje, hasta ahora se ha trabajado con volúmenes pequeños y con más buena voluntad que capacidad. Hay que poner en valor el interesante punto de partida que tenemos, con organizaciones y empresas que llevan años proporcionando este tipo de servicios y que, en la actualidad, se debaten entre industrializarse liderando esta revolución o esperar a que los volúmenes recogidos selectivamente crezcan, tanto que sea un imperativo escalar industrialmente en eficiencia, tecnologías y, también, con nuevas capacidades.
Los bajos márgenes y precios en el sector del reciclaje textil dificultan atraer inversiones tradicionales. La adopción de tecnologías innovadoras, aunque necesaria para la sostenibilidad, a menudo carece de una justificación económica a corto plazo, lo que limita su implementación.
Para explorar las tecnologías que pueden marcar una diferencia significativa en la preparación y reciclaje de residuos textiles en España, no solo debemos ser capaces de pensar desde "fuera de la caja", intentando buscar nuevas tecnologías que impacten directamente en la eficiencia y la eficacia de los procesos de preparación para el reciclaje, sino que debemos empezar a ir a otras "cajas". Allí debemos ver cómo (otros procesos, otros sectores, otros ámbitos…) han sido capaces de aplicar tecnologías innovadoras en procesos similares o comparables con los que tenemos en la cadena de valor de la moda, textiles y calzado.
Para transformar el reciclaje textil en España es necesario adoptar una visión sistémica que vaya más allá de las tecnologías aisladas. Debemos analizar cómo otros sectores han abordado desafíos similares y cómo podemos integrar sus soluciones en nuestra cadena de valor. Esta perspectiva integral nos permitirá desarrollar un modelo de reciclaje más eficiente y sostenible.
La gestión eficiente de los residuos textiles es crucial en el contexto de la sostenibilidad y la economía circular, que son los dos conceptos clave que la nueva legislación europea va a implementar con fuerza, dentro de la cadena de valor del sector textil. En concreto, esta legislación exige mayores tasas de reutilización y reciclaje, y para ello, es esencial adoptar tecnologías avanzadas para manejar el volumen creciente de residuos textiles y caminar hacia una moda más sostenible.
Además de las propias metodologías de optimización de la producción por mejora de las competencias de la fuerza laboral (como, por ejemplo, procesos lean) y, en nuestra opinión, las principales tecnologías que se pueden aplicar de manera eficiente en los procesos de preparación para el reciclaje textil y que, de ese modo, darían un impulso industrial al mismo, incrementando la eficiencia y aumentando la capacidad de procesamiento, se pueden agrupar en los siguientes grupos:
La visión artificial: precisión y eficiencia en la identificación
Una de las tecnologías más prometedoras para el reciclaje textil es la visión artificial. Esta tecnología utiliza cámaras y algoritmos avanzados para capturar y analizar imágenes de textiles, permitiendo una identificación precisa y eficiente. Los sistemas de visión artificial pueden identificar diferentes tipos de tejidos, colores y patrones, lo que facilita a posteriori la separación de materiales reciclables de aquellos que no lo son.
Ejemplo: En una planta de reciclaje, se puede implementar un sistema de visión artificial que utilizando cámaras de alta resolución pueda identificar textiles de forma mucho más eficiente. Estos sistemas llegan a mejorar la precisión de la clasificación en un 30%, reduciendo significativamente el desperdicio y mejorando la eficiencia del proceso. La visión hiperespectral, que combina la visión artificial con la espectroscopía de infrarrojo cercano (NIR), se puede utilizar para identificar la composición química de las fibras textiles, permitiendo una clasificación más precisa basada en la composición del material.
Robótica avanzada: automatización y reducción de costes
La robótica avanzada es otra tecnología clave que puede revolucionar el reciclaje textil en España y ayudar a una moda más sostenible. Los brazos robotizados sumados a las tecnologías de visión artificial y aprendizaje automático pueden realizar tareas repetitivas y pesadas, como la selección y clasificación de textiles, con una precisión y velocidad superiores a las del trabajo manual.
Ejemplo: Adoptar brazos robotizados, desplazadores automáticos u otros elementos que, combinados con la clasificación avanzada, nos permiten automatizar la clasificación de residuos textiles, mejorando las ratios de clasificación y los volúmenes gestionables. Estos robots utilizan cámaras y algoritmos de visión artificial para identificar y separar diferentes tipos de tejidos, eliminando materiales no deseados como botones y cremalleras que pueden interferir con el proceso de reciclaje. La implementación de estos robots puede permitir reducir los costes operativos en un 25% y aumentar la eficiencia de la clasificación en un 40 %.
Sensorización avanzada más monitorización: datos en tiempo real para una mejor toma de decisiones
La sensorización avanzada es esencial para la adquisición de datos en tiempo real. Los sensores ópticos, infrarrojos y de espectroscopía se utilizan para identificar materiales y composiciones de los textiles, facilitando su clasificación y procesamiento, además de poder darnos mucha información del residuo en global.
La integración de plataformas de datos, con toda esta información que podemos conseguir de manera automatizada y su análisis, es crucial para la operación eficiente, el monitoreo y la optimización constante de los procesos de reciclaje textil. Estas plataformas recopilan información y proporcionan insights valiosos para mejorar la eficiencia y la sostenibilidad del proceso.
Ejemplo: Una planta de reciclaje puede integrar sensores avanzados que proporcionen datos precisos y en tiempo real sobre la calidad y composición de los residuos textiles (composición, estructura de tejidos, gramajes, existencia de impropios, % de cada uno de ellos, etc). Estos sensores permiten suministrar la información necesaria a la plataforma de datos, que con algoritmos e incluso IA, permita entender y definir patrones complejos que hagan posible diseñar y ajustar los procesos de preparación y reciclaje, en función de la información recibida, mejorando la eficiencia y reduciendo el desperdicio. Hay ejemplos de otros sectores que están reportado una mejora del 20% en la precisión de la clasificación y una reducción del 15% en los residuos no reciclables.
Proceso de separación de materiales en composiciones mixtas
Uno de los grandes retos de la circularidad de materiales provenientes de prendas de ropa es maximizar el aprovechamiento de los materiales que se encuentran en composiciones mixtas. Estas composiciones, difícilmente tienen un aprovechamiento directo en procesos de reciclaje textil (fibra a fibra) para volver a conseguir hilos de calidad y que acaben formando parte de nuevas prendas. Por lo que es vital la implementación de procesos industrializados que sean capaces de separar materiales, consiguiendo materias primas utilizables en procesos, tanto del sector textil, cómo de otras manufacturas.
Ejemplo: Una planta para el reciclaje de material poli-cotón (tejido con composiciones de algodón y poliéster), cuenta con un proceso de disolución selectiva, con el que se separan tanto el algodón, cómo el poliéster en formato polímero, en material. Este proceso consigue recuperar porcentajes muy altos de poliéster con sus características primigenias y el algodón, que se recupera mediante precipitación de la disolución y que se utilizará en proceso fuera del sector textil.
Como conclusión, y a modo de reflexión, entendemos que la revolución tecnológica está transformando la industria del reciclaje textil, ofreciendo soluciones innovadoras para abordar el creciente problema de los residuos textiles y avnzar a una moda más sostenible. Los procesos de preparación para el reciclaje son una necesidad a corto o medio plazo y que, sin la adopción de tecnologías avanzadas como la visión artificial, la robótica avanzada, la sensorización y las plataformas de datos, no seremos capaces de hacer frente a la exigente legislación que tenemos delante.
Necesitamos hacer más eficientes, trazables y, por supuesto, sostenibles todos los procesos de esta “nueva” cadena de valor. Con la presión de la nueva legislación europea y la creciente preocupación por el medio ambiente, es crucial que el sector textil español adopte estas tecnologías para cumplir con los objetivos de sostenibilidad y promover una economía circular en la que, nuestro país, puede ser un referente internacional.
La implementación de estas tecnologías no solo mejorará la trazabilidad, eficiencia y calidad del reciclaje textil, sino que también aumentará la reutilización, reduciendo el desperdicio y, por lo tanto, aumentando la sostenibilidad del proceso, llevando a una moda más sostenible. Adoptando de manera rápida estas innovaciones, España puede liderar el camino hacia un futuro más sustentable y responsable en la gestión de residuos textiles.